29 de agosto de 2015

Ironía

Odio ser un fantasma
acechador de sueños
ficticios. Vivo en Babia
soñando entre posibles
versiones de mi mismo
sin ser en verdad nada.
Y tanta es mi pasión
que por quererlo todo
pierdo mis regias alas.
Dicen que no idear
eternamente el cómo
pudieron ser las cosas
te liberta a ti mismo.
Yo sé que mi incurable
búsqueda de certeza
me paraliza y ciega.
Dicen que no tomárselo
todo con transcendencia
te aligera de dudas
mientras sacas provecho.
Yo sé que mi porfía
jamás genera renta
mas me llena de ausencia.

Quizás me equivocara...

Sin querer desconozco
lo que es vivir la vida
habiéndola querido
vivir toda mi vida.

¿Debería cambiar?

No hay comentarios:

Publicar un comentario