29 de mayo de 2011

Ahora, un tiempo...

Es infame el sueño del dolor
que aún a apaleado corazón
sigue repartiendo guerra,
incluso en inferioridad.
Y hacia los muros ácidos,
la sustancia que me atrapa,
van o iban, ya remoto,
a estirones, yo a impotencia.
Mas más míseros mis males,
ahora que ni vivo, ni respiro,
ni ahogo en llanto; olvido.
Que voy de lado a lado; sí.
Mirando al frente, agobiado,
que entre plataformas muero,
por la que se hunde, veo,
que poco más; poco queda.
Y angustiado, por marcharme,
para llegar a una igual,
que no dura, que no hay pasión;
atroz; desinteresando.

----------------------------------------

Nadie puede oír las palabras tal y como retumban en mi mente. No hay más voces, ni siquiera la mía, sólo la del corazón que grita y chilla. Y lo hace, cómo no, como nadie más lo hace. No, nadie más conoce, cómo grita; cómo chilla.

---------------------------------------

Total de palabras escritas: 34250

17 de mayo de 2011

Atrapadas, las palabras.

Dime quién sino, uno sólo, quién diría, yo...
No puedo evitar sentirte sintiéndome, como... ¿Creía o fue verdad?
No sabes, desconocido el sentimiento, ingenua, para ti es, será... o lo que sea.
¡No lo sabes! Y digo en alto a corazón con alma, que'l dolor lo es y qué, no puedo hacer yo más; pero que hay algo peor, y es que no se si fue verdad. Creía, lo fue... para ti, quién me lo dirá, qué sentiste, desconozco, fue sincero el alma de tu abrigo, tantos besos, tan pocos, incumplidos, amargos, por ahora, con dolor... o lo que sea.
Seré sincero. Sin tapujos, que hoy no quiero.
Seré sincero...

No hay mayor tristeza, siendo lo que soy, hoy por hoy, que'l pensar que no me amaste, que los días fueron, tan sólo, una genialidad del arte. Sí, es inigualable, el verme siendo entero, tan tuyo como entonces, permitiéndote serte bella, quizás por este último momento, si me dices, que no harás, ¿De verdad verdad lo fue?

No conozco a nadie más. Sólo yo solo hoy, sabiendo que quizás no exista ya jamás, algo igual, conmigo, que daría tanto entonces, como ahora, si el ayer trajera sueños y el después ya no existiera. Porque fui yo quien te amó del todo. No hubo más, no más que una amistad tan fuerte, que jamás pensé que de poder lo hiciera; desapareciera.

¿Por qué esta prisión de palabras? No consigo simular, ni pintando ni cantando ni escribiendo, todavía, por desgracia, no hay... algo parecido al sentir.

1 de mayo de 2011

La que mal decidió.

Es imposible expresar aquello invisible a la inútil razón.
Los hay quien intentan, pero no llegan, no són,
lo suficientemente prácticos para tan solo decirte:
es fuerte, lo siento, no hay más y créeme amor,
cuando te digo y es cierto lo del corazón.
No hay palabras ni estrofas que logren perderte,
no como a mi vida tus ojos. O aquella canción,
la que puede, la única, decidir por mi o no:
Imposible, no llego, sólo puedo decir,
es fuerte lo siento, lo es cierto, del corazón,
sin palabras me pierdo, ay tus ojos de aquella
mañana fría, del día, dijísteme adiós.