24 de septiembre de 2018

Novedades

Soy eclipse de murmullo
y de un levísimo aleteo
frígido; polvo de restos.

Duelo de dolor: persiste
frente al reflejo pasajero
de gris, y a veces colores.

Repliego mi persona en contra
el vacío que aglutina
trozos rellenos con fisuras

y rabia insulsa, de cansancio
pálido y acomplejado.
Remuévense mis intestinos.

Languidece lumbre lóbrega
entre suspiros: rendiciones
prestas frente afrentas. Y

no lloran ocelos tristes;
sobre mí reposa la mar
un silencio atronador.

17 de septiembre de 2018

Yo contra mí mismo

Mis sueños fueron sólo un sueño
difuso, no sin mentiras varias sobre
y hacia mí mismo; ficticio

me siento al mirarme en el espejo
y siento, una mirada exhausta,
sobre mí mismo; entristecido

por tanta nada inmóvil y esclava
de mi cerebral rutina; batallas
entre mí mismo, y siempre pierdo

un cacho de la paciencia que carezco;
vuelan huyendo mis latidos tenues
de mí mismo y mis recelos

por tan poco de todo; nómada frágil
que pinta a tientas un roto blanco,
y a mí mismo: transparente, de recuerdos

que ya he olvidado, y de mi olvido
que no logro dejar de recordar
ante mí mismo. Satírico. Persistente.

Pesadísimo.

30 de agosto de 2018

Las tres torres

Entre tanto y tanto, tanteando
destapé mentiras sobre mí mismo
y duele el duelo que se hace eterno.

No lloro.

Y lloro por dentro.

Mientras, meneo mi mareo errático
y que anhela de aire un hálito, frío:

la noche cerrada.

Mis días.

Más; sin conocer a ciencia cierta
ni siquiera, si la verdad que veo
resiste un parpadeo lunar.

21 de abril de 2018

Tinte

Soy sombra de susurro,
perturbado en secreto
por pesadillas perennes.

Vivo encadenado en
cadencias demenciales.

Y mientras, tras de mí,
entre mentiras tientan
sesenta seniles sueños.

Rezo al amparo del dolor
una letanía encinta;
la oscuridad retroalimenta
figuras negras y retorcidas.

Lloran. Y gritan. Agachapadas.
Lejos de todo y de sí mismas.
Entre jadeos: mirada perdida.

Mi corazón...
Mi corazón...
Mi corazón.


                        No siento
mas que un agarre-zarpa
de tinte azul, y profundo.

22 de febrero de 2018

Confieso

Solamente he llorado
a la sombra del ocaso
como siempre solitario.

Encontré sin llegar a hallar
mas seguí perdiendo algo.
La nada ya no apacigua
entre ansiedad tormentosa.

Si debo confesar, confieso.
No siento; no mucho más allá
de mi fragmentado ego.
Ciego, y que anhela ser avistado.

¿Qué debo decir? No puedo
escapar de mí mismo. No,
sin perecer en el olvido.
Soy maldición; soy máscara.

¡Ayúdame! ¿No puedes
cantar un lienzo en calma,
fresco, y arropar mi sino?
No puedes ayudarme.

No en la oscuridad ni a la luz
hay reposo. Desplegándose
va un mapa de sitios clave
que no logran ser visitados.

Fracasé y he fracasado.
Recuerdo todavía cuando
apenas tenía algún recuerdo.
En mi capullo, quizás feliz era.

No sólo he llorado, confieso,
alguna cosa continúo olvidando.
Ayudarme no puedes. Recuerdo
que me voy perdiendo entre sueños.