23 de mayo de 2016

Prado de primavera

Estrellas de sol y mediodía
filtradas por tu perfume sedoso;
tu nariz resulta un blanco fácil
bajo aquella tela de añil danzante.

Entre la brisa fresca tus caderas
reposan y mis manos anhelan
bajo la calidez prístina. Besos
fugaces y caricias tranquilas.

Mis dedos quedan enmarañados
entre los rizos que de noche juegan
con mis pensamientos. Sin embargo,
genero un claro cedido a mis labios.

Las flores cantan notas distinguidas
sobre un lecho especial de esmeralda;
tú me sigues a tu sueño de calma
rubí, citrina y aliento ardente.

Busco en tu mirada las respuestas
de mi corazón. ¿Qué pasa?, preguntas
siempre a mi enigmática sonrisa.
Yo callo o suelto alguna tontería.

No puedo ni quiero escapar; te encuentro
cada vez más. Cercas mi visión
de esperanzas. ¿Dónde estabas amor?
He aguardado por ti tanto tiempo...