18 de enero de 2013

Árboles de frío amanecer

Al cielo brazos de súplica,
gritos en alza acallados:
acinesia gris, acongojada.

Con miedo sonido claro, helando.
Grave empatia sobre mi hálito.
Enfrente la nada, vacío humano.

Al salobrar en suelo restos
crujientes; miles de arañazos,
talla en los despojos últimos.

Hogares: cientos de ancianos.
Mobiliario: neonatos por hojear.
Calor: frío, silencio, soledad...

La nada no esconde el silencio, 
si más no bien, que la propaga...
Calla encapotada, la tyerra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario